Un catálogo o una tienda online no solo es diseño y programación. Es experiencia en el sector. Pasarelas de seguridad. Formas de pago. Es una buena estructuración del proyecto para que se convierta en una herramienta de venta y generación de recursos para la empresa con los mínimos costes de mantenimiento. Es la posibilidad de autogestionar desde el departamento comercial de la empresa. De enlazar con los protocolos y la base de stock del cliente y generar estadísticas y datos.
Son proyectos a medida y sin límite.